TESTIGOS ASEGURAN

Testigos aseguran que el alcalde estaba preocupado por su persona

Huesca, 17 nov (EFE).- Enrique Barcos, actual alcalde de Fago, y Francisco Assier G.G., amigo personal del edil asesinado, han declarado hoy que Miguel Grima estaba "muy preocupado por su persona" en los últimos meses e incluso decía que "cualquier día" aparecería "en una cuneta".

Así lo han indicado ambos en sus respectivas declaraciones durante la segunda sesión del juicio por el asesinato del alcalde de Fago que se celebra en la Audiencia de Huesca, en la que han prestado testimonio hoy la viuda de Grima, Celia Esterlich, y cuatro agentes de la Guardia Civil encargados de la investigación del crimen.

Francisco Assier ha explicado que Miguel Grima sufría acoso y le insultaban por la calle e incluso un ganadero, a quien no ha identificado, le llegó a lanzar piedras, unos problemas que a su juicio comenzaron cuando él accedió a la alcaldía, por decisiones urbanísticas o referentes a los pasos del ganado por el pueblo.

Estaba sometido "a un presión impresionante", ha recalcado el testigo, quien ha asegurado que el alcalde le indicó que Santiago Mainar era una de las personas que "de forma más notoria" tenía conflictos con él.

Ha detallado una conversación telefónica con Grima, en la que le dijo textualmente: "estos me están preparando algo", y ha insistido en que en los últimos meses decía muy a menudo que "cualquier día apareceré en una cuneta".

A su juicio, Grima era una persona "muy preocupada" por el pueblo, que nunca tomaba una decisión de forma arbitraria e incluso llegó a tener problemas en su relación por la pasión con la que trabajaba y el tiempo que le dedicaba a Fago.

Respecto al médico Iñaki Bidegaín, que supuestamente vio al asesino de Grima en la carretera de Majones a Fago poco después de los hechos, simplemente ha dicho que no vivía en el pueblo habitualmente y tenía relación con varias personas en el pueblo, entre ellos Santiago Mainar, "desde luego".

Por su parte, Enrique Barcos, actual alcalde de Fago, elegido al frente de la lista del PAR, ha resaltado que Grima tenía una premonición y repetía muchas veces: "estos me están preparando algo".

Ha reconocido tener una relación de amistad con Grima, muy interesado en el pueblo pero que se había vuelto "un poco" precavido tras los problemas surgidos con algunas personas de la localidad, pero ninguna con Santiago Mainar, quien por el contrario nunca tuvo una actitud de preocupación por los intereses de Fago y de hecho nunca fue a un pleno en la localidad.

También ha declarado hoy Adolfo Navarro, vecino de Fago y que fue alcalde del municipio en dos ocasiones, en el decenio de los años sesenta del pasado siglo y posteriormente desde 1987 hasta 1991.

Ha definido al alcalde asesinado como una "excelente persona" y "muy bueno", que se dedicaba a la alcaldía "hasta demasiado". "El mejor alcalde que ha tenido Fago", ha recalcado.

Preguntado por el crimen, ha considerado que ahí "hay mucho que investigar" porque a una reunión de alcaldes se sabe cuándo entras pero no cuando sales, y ha opinado que alguien tuvo que avisar de que Grima volvía. EFE