López asegura que al PNV "le molesta que la sociedad no les eche de menos"

El lehendakari, Patxi López, aseguró este sábado que a los
nacionalistas vascos les molesta que "en Euskadi empiece a ser normal
lo que es normal en todas partes" y que los ciudadanos "no les echen de
menos" tras su salida del Gobierno vasco.
En el acto de
reinauguración de la Casa del Pueblo de Muskiz (Vizcaya), López también
dijo que se podrá criticar al Gobierno vasco por su inactividad, pero
dichas acusaciones "serán críticas huecas y vacías de contenido" porque
"la realidad está ahí" demostrando que su Ejecutivo "se pone al frente
del país, lidera las soluciones y utiliza todas las posibilidades y los
recursos del autogobierno para resolver problemas y para hacer
políticas de país".
A su juicio, el Gobierno que lidera
es el primero "de izquierdas" en Euskadi "desde la recuperación de la
democracia y de su autogobierno".
"Y lo digo con
orgullo, en mi condición de socialista. Y lo digo también con una
satisfacción y un agradecimiento inmenso a todos vosotros, a toda la
militancia ejemplar de este partido, que ha sabido defender el proyecto
de país y de sociedad que representamos", añadió.
El
lehendakari explicó que su Ejecutivo "está introduciendo a la política
vasca por la senda de la normalidad", situación que "molesta a algunos"
que no aceptan que "haya un Gobierno empeñado en prestigiar nuestras
instituciones y las normas de las que nace nuestro autogobierno y
nuestro marco de convivencia: la Constitución y el Estatuto".

Además, dijo que a estas personas y partidos también les molesta que
los socialistas hagan política "para la ciudadanía y no para la
identidad", como por ejemplo en política exterior, donde ahora se
defienden "los intereses de los ciudadanos vascos, de nuestra economía,
de nuestro tejido empresarial", dejando "a un lado el adoctrinamiento
político nacionalista".
"Les molesta que este Gobierno
consiga transferencias que ellos han sido incapaces de conseguir en 25
años y por eso ponen obstáculos para impedirlo. La verdad es que podría
seguir poniendo muchos más ejemplos, pero lo que más les molesta es que
la sociedad vasca esté asumiendo con naturalidad y de manera positiva
todos estos cambios", aseveró.
López consideró lógico
que al PNV "no le echen de menos" porque, según se preguntó, "¿Cómo van
a echar de menos la confrontación permanente que vivíamos en éste país
hace sólo unos meses?. ¿Quién va a añorar el conflicto constante o los
planes para dividirnos y fracturar a la sociedad?".
De
igual forma, destacó que en "sólo" siete meses, los socialistas han
logrado "demostrar que este país se puede gobernar de otra manera", es
decir, a través del diálogo y sin perder el tiempo en "conflictos
políticos que sólo interesan a algunos dirigentes políticos
determinados".
Frente a las acusaciones de frentismo,
defendió que su Gobierno ha sido el que "más acuerdos transversales" ha
logrado desde hace 20 años. Como ejemplo puso "el acuerdo de bases para
el tiempo del cambio con el Partido Popular; acuerdos múltiples en la
Mesa de Diálogo Social con empresarios y sindicatos de clase; y un
acuerdo para la función pública con los sindicatos, incluido ELA, con
quien había sido imposible en los últimos diez años".

También destacó el acuerdo presupuestario con el PP, un acuerdo de
estabilidad institucional con el PNV, que han permitido que los
primeros presupuestos de éste Gobierno sean los que han tenido el menor
rechazo desde que recuperamos el autogobierno; y acuerdos
parlamentarios todas las semanas, que hacen que las iniciativas tengan
un respaldo más que notable".
"RESPUESTAS COMPARTIDAS"

Por este motivo, subrayó que "la gran virtud" del actual Gobierno vasco
es que "sabe sumar para dar respuestas compartidas a los problemas de
los ciudadanos de este país".
En este sentido, recordó
las actuaciones del Ejecutivo en los últimos días, como el Basque
Culinary Center, el centro ESS de Bilbao en el campus de la UPV de
Leioa, o la firma con Mercedes-Benz para construir vehículos eléctricos
en la planta de Vitoria.
Con todas estas medidas,
añadió, se ponen "las bases más sólidas para salir cuanto antes de la
crisis y salir reforzados y en las mejores condiciones para que nuestro
tejido industrial haga frente a los retos de la competencia global".

Asimismo, planteó al conjunto de la sociedad vasca "un nuevo modelo
económico, un nuevo modelo educativo, sanitario, tecnológico,
ecológico, un nuevo sistema de servicios sociales", fruto de una
"reflexión profunda" que sirva para situar a Euskadi como "modelo de
referencia de desarrollo, bienestar, calidad de vida, protección social
y sostenibilidad".
"Lo que propongo es muy ambicioso.
Pero para eso hemos querido, durante años gobernar. Para hacer realidad
un proyecto de país en el que quepamos todos; en el que todos tengamos
los mismos derechos y las mismas oportunidades; un país que sea
conocido, no por sus conflictos, sino por los valores que atesora. Un
país que se llama Euskadi y que os animo a que sigamos construyéndolo
juntos", concluyó.